fbpx

Ruta circular en Peña Canciás. Fiscal.

¡Senderos recuperados!

Otro de los destinos de la donación 2017 de Tronzadora fue la limpieza y señalización de unos cuantos caminos en torno a Peña Canciás, a propuesta de la asociación que lleva el nombre de la montaña. Aquí os dejamos la memoria para que veáis todo lo que se ha ejecutado.

Hoy vamos a recorrer una ruta circular que une dos de los recorridos, partiendo de Borrastre hasta el Collado de Gabardón y bajando por la vertiente que da al túnel de Petralba hasta llegar a Fiscal y volver al punto de partida. Esta circular se utiliza también como circuito para las carreras de Peña Canciás, así que os puede servir de entrenamiento también.

Borrastre, salida y llegada.

Así pues, partiremos de la pequeña aldea de Borrastre, a unos 820 msm. Situada en la ribera del Ara y en la vertiente norte de Canciás, llegaremos a ella tras cruzar Fiscal. Si tenemos suerte allí nos recibirán los guías caninos locales, que batirán sus rabos alegres al ver a un senderista y nos acompañarán a lo largo de todo el recorrido.

Una vez finalizadas las presentaciones emprendemos la marcha y tras unos metros de camino entre muros salimos a una pista forestal. En ella podemos encontrar vallas para controlar el ganado, tendremos que arreglárnoslas para sortearlas sin variar su estado inicial (normalmente cerradas). Deberemos estar atentos también al track y a las indicaciones, que nos permitirán seguir la ruta sin problemas.

La pista asciende progresivamente entre pinos y robles, en un giro a la izquierda de ésta, debemos seguir las indicaciones y continuar de frente por la trocha. Vamos poco a poco entrando en las profundidades del barranco de Borrastre y conforme avanzamos hacia la umbría los pinos se transforman en abetos y hayas. La trocha se ve salpicada por árboles caídos y otros  que comienzan a recuperar el terreno de la antigua vía, en todo caso si seguimos las indicaciones no tendremos ningún problema.

La cara umbría del barranco, o como decimos aquí; l’obago.

Buena subida.

Poco después de cruzar el barranco el camino gira a la izquierda y comienza a zigzaguear, empinándose considerablemente. Si no habíamos empezado a sudar, este será el momento. La pendiente fuerte apenas da tregua, pero a cambio las vistas al norte cada vez son más espectaculares, así que un alto para tomar resuello y oxigenar los gemelos puede ser clave.

Las vistas hacia el norte son espectaculares en un día claro como hoy.

El interminable zig-zag finaliza en el collado Peñarroya (1550 msm), un resalte destacado en la cara norte de Canciás. Si realizamos el recorrido en invierno este es uno de los pocos puntos en los que el sol puede bendecirnos, así que un bocado y un trago de Tronzadora (en bota para las excursiones va fetén) harán las veces de poción mágica para el resto de la excursión.

         No acaba aquí la subida, aunque continua de forma mucho más leve hasta el collado Gabardón (1640 msm), punto más alto de la excursión y desde el cual podemos llegar a Canciás siguiendo un camino señalizado. Aquí también tenemos un ratito de sol, casi apetece almorzar y sestear otra vez, pero los guías se inquietan y no dejan parar.

Descenso.

Afrontamos raudos el descenso, bajo un precioso manto de hayas que más abajo da paso a pinos y abetos. El primer tramo de bajada es ciertamente agradable, pero no tarda en inclinarse conforme nos acercamos a la trocha. Hemos de tener en cuenta en este tramo que vamos en la dirección opuesta de las señales que marcan la subida por aquí a Canciás, no entréis en cortocircuito.

Atravesamos el joven hayedo.

Pronto tomamos la trocha que nos llevará paralelos al barranco de San Salvador. La trocha se convierte en pista y, por si habíamos perdido la orientación, no tardaremos en ver el túnel del Petralba y la carretera que une Fiscal Con Yebra de Basa. La pista que ahora seguimos va por la ladera de enfrente de la misma, cruzando varias veces el barranco. Algún valiente hasta se puede dar un chapuzón, como los intrépidos cánidos en pleno invierno.

Ya nos acercamos a la civilización, y pronto nos toparemos con la carretera que une Lardiés y Fiscal y que nos lleva a esta ultima localidad. De allí a Borrastre solo nos falta un tramo casi llano, que nos servirá de recuperación. Podremos paladear durante este trayecto todas las sensaciones vividas y echar un vistazo a Canciás en todo su esplendor y el recorrido que hemos completado. ¡A por la próxima, salud!